Necesitaba escribir, solo eso...

Necesito escribir y lo hago pese a las prohibiciones a hurtadillas y a bolígrafo, pero echo de menos los colores, el borrar "del tirón" el encontrar lo que busco con un clic...

No ha ocurrido nada relevante, bueno si, ahora que lo pienso el otoño ha entrado en el calendario pero como ya es costumbre, aun no lo hizo en Madrid. La gente sigue paseando en sandalias y camisetas de tirantes. Las japonesas (sigo sin soportarlas) aun llevan sombrero por el sol y mis vecinas orientales (estas son chinas) venden abanicos en el suelo de la Puerta del sol.

Argentina tiene un trozo de suelo de la Plaza Mayor y hasta han puesto un obelisco con flores alrededor. Yo he comido dos bocaditos "cabsha" por probar y una empanadilla. Se me quedaron las ganas en el cuerpo de comprar un alfajor, pero ...aun les queda una semana de estar en mi camino, así pues no lo doy por perdido.

Tengo la cabeza llena de ideas, están saltarinas y a cada salto parecen enredarse mas. Necesito poner en orden todo este caos, pero es difícil entre el dolor y el miolastan.

Alguien ha vuelto a decir de mi hace muy poco que soy "fuerte" otra de esas mentiras que a fuerza escuchar ya tenia que haber creido, pero el caso es que después de oírla toda una vida aun no me la creo. En el fondo es como decir_ ¡apañatelas tu sola bonita!

Pero volviendo a las ideas, una en particular revolotea como una mariposa recién salida del capullo. Es esa idea que me señala lo que quiero hacer para ganarme el sustento, aun es como demasiado sutil para percibir sus matices. Yo solo espero que se pose sobre una de las neuronas que me quedan sanas y pueda comprobar si tiene sentido y viabilidad.