martes, 27 de abril de 2010

Si a la mantilla, No a las corridas de toros.


La mantilla española no tiene un origen bien conocido, aunque se cree que deribaron de los velos y mantos que utilizaban las mujeres como adorno y como prenda de abrigo. La evolución de esta prenda estuvo marcada por factores sociales, religiosos e incluso climáticos. Los primeros usos de la mantilla, se dieron entre el pueblo llano y no eran utilizadas por la aristocracia.
A principios del siglo XVII, comienza una evolución de la mantilla siendo sustituido el paño por los encajes, y poco a poco, empieza a extenderse el uso de esta prenda como ornamento, aunque habría que esperar hasta bien entrado el siglo XVIII para que la mantilla empiece a ser utilizadas por las clases más altas.
Un hecho reseñable en la historia de esta prenda , es el conocido como "la conspiración de las mantillas". Que consistió en una forma pacifica de protesta de las mujeres españolas frente a las nuevas costumbres extranjeras que parecían querer imponer Amadeo I rey de España (Amadeo de Saboya 1845-1890) y su esposa María Victoria. Despues de esto y alguna cosa mas, Amadeo I renunció al trono de España debido a la "ingobernabilidad" de los españoles.
Según marca la tradición, la mantilla blanca o marfil, solo la visten las solteras, y la mantilla negra, queda reservada para las casadas y aunque en realidad las tradiciones en este sentido no se siguen, yo como no soy ni soltera ni casada me la pongo la colorada.

viernes, 23 de abril de 2010

Standby

San Jordi, libros y rosas...para todos...para otros.

Se mueve el mundo mientras mi corazón se ha quedado en standby.

Sirve para recuperar el equilibrio

Sonrisas hoy a precio de ganga.

Superación!

sábado, 10 de abril de 2010

post coitum triste


Esta noche con los ojos cerrados escuchando la respiración relajada del hombre que dormía a mi lado me preguntaba si el resto del mundo se ha enfrentado alguna vez a la tristeza que te invade después hacer el amor. Durante mi soliloquio "silencioso" me respondía que sí, que era imposible que me ocurriera solo a mí cuando Aristoteles ya hablaba de esa tristeza o por lo menos a él se le atribuye la máxima "post coitum triste". Así que es probable que la mayor parte de la humanidad haya experimentado ese estado de desolación y perdida que te inunda después de separarte del cuerpo de tu amante. También Beckett ponía en boca de su Winnie lo familiar que resultaba esta situación cuando la comparaba con la tristeza que te invade después de cantar. ¿Sera verdad que no somos seres completos, que necesitamos unir yin y yan para formar la perfección del circulo? y lo que es mucho mas dramático, ¿ sera verdad que existe ese ser humano que contra todo pronostico y lógica complementa a la perfección y sin fisuras tu esencia inmortal? Lo que mas me sorprende es no haberme dado cuenta hasta ahora, porque con mis otras parejas nunca sentí esa tristeza, espero que sepan perdonarme si alguno de ellos recala por estas letras, pero la verdad es que habiendo pasado por casi todas las formas convencionales de terminar un encuentro intimo, incluido aquel en el que los amantes se abrazan hasta que el sueño les libera y les separa, nunca sentí como si me faltase la mitad de mi carne, como si fuera separada a la fuerza de mi hermano siamés...y sin embargo desde que él llego a mi vida hace ya casi tres años, después de una noche de amor abandono mi cama por la mañana como si me faltasen los brazos o las piernas... o quizá sea solo una parte del alma lo que siento que me falta cada vez con mayor intensidad y me levanto con la extraña sensación de que soy polvo estelar y mientras me expando solo espero el momento de volverme a contraer.

martes, 6 de abril de 2010


Lo bueno de estar enamorada es que todo lo demás, el estudio, el trabajo, la compra, la familia, el dinero, el recibo de telefónica, el horario, el billete de metro, la peluquería, la visita de un amigo, el sueño, las fotos, madrugar, la dieta, el dentista, comer con mama, el jefe, elegir el menú, atender al publico, la música, buscar piso, los amigos, el cine, los libros, escribir al banco, la noche, limpiar la casa, estirar los músculos, el día, comprar el pan, el gris, regar las plantas, ponerme crema, el guión, el agua, el maquillaje, madrugar, el insomnio, el blog, la tele, el tren, la lluvia, llorar, el sol, el cumpleaños, el dolor, actuar, el pc, viajar, la ducha, reír, fregar los platos, salir de compras, el cartero, andar con tacones, comer sin sal, el fútbol, todo absolutamente todo, parece mejor de lo que es, pero cuando tomas la decisión de amar, entonces no solo lo parece, entonces lo es.